La República Dominicana es uno de los destinos preferidos por los turistas estadounidenses y europeos, por sus hermosos paisajes y la gran calidad de su oferta hotelera. La nación tiene más de 70,000 habitaciones que hospedan cerca de siete millones de turistas anualmente, lo que ubica este sector como uno de los más importantes dentro la economía dominicana, por ser la mayor fuente de riqueza y de divisas del país. 

Este segmento posee una competitiva oferta hotelera, mano de obra preparada, una moderna infraestructura y un marco legal e institucional que fomenta la inversión en este sector. Por ello, el país se destaca como el primer destino turístico y campo de golf del Caribe, el más atractivo para la inversión extranjera. 

Entre las oportunidades más rentables de inversión están el turismo inmobiliario, cruceros, ecoturismo y turismo de golf. 

Poseedor de suelos y tierras fértiles aptas para el cultivo de frutas y vegetales todo el año, lo convierten en uno de los sectores más importantes de la economía dominicana, que según datos gubernamentales durante el año pasado aportó a la producción nacional US$3,645.15 millones, equivalente al 4.1% del PIB total. También los sectores de ganadería, silvicultura y pesca han tenido un interesante crecimiento del 3.5%.   

Entre los cultivos más productivos están el azúcar, el arroz, el café, el cacao, las naranjas, el aguacate, la piña, el melón, los ajíes, los mangos  y las bananas, que son exportados principalmente a Estados Unidos, Haití, Canadá,varios paises europeos e India. 

Con la llegada de las nuevas tecnologías al país, el sector de las telecomunicaciones se ha convertido en una de las principales fuentes de empleo y divisas. La República Dominicana ha logrado ser uno de los países mejor comunicados gracias al aumento de las inversiones extranjeras. Actualmente, operan 104 empresas autorizadas para ofrecer servicios móviles, internet, televisión por cable y satélite.  

El Banco Central ubica este sector entre los de mayor ponderación del PIB. Es importante destacar que entre el 2010 y el 2020 el país recibió a través de la inversión extranjera US$27,419.4 millones, de estos US$1,060.4 millones de destinaron a las inversiones en telecomunicaciones, lo que representó un 3.9% del total de IED recibido durante esta década.

De acuerdo con el programa Iniciativa de Transparecia en la Industria Extractiva (EITI), gracias al perfil geológico de la nación, actualmente es catalogado como el segundo depósito más grande de oro de América y además produce una amplia gama de recursos mineros como: plata, bauxita, ferroníquel, minerales industriales, cobre y zinc. Adicionalmente, produce otros productos mineros no metálicos como son: arcilla, arena silícea, lajas, rocas calizas, yeso, sal y mármol.

Junto con esto, el país posee importantes yacimientos de ámbar amarillo pálido  y azul, este último es más duro, exótico y apetecido en los mercados internacionales. Esta resina fósil que forma parte de las gemas orgánicas como por ejemplo el azabache, las perlas y los corales, es producida por la fosilización de la resina del árbol conocido como el algarrobo. La República Dominicana también es la única poseedora de depósitos naturales de larimar, una piedra semipreciosa de color azul marino, verdoso o en ocasiones blanco lechoso que tiene un gran valor en el extranjero.

En este contexto, el sector minero ha logrado alcanzar una alta participación de la Inversión Extranjera Directa (IED), gracias al incremento de los niveles de explotación y producción del oro, el mármol y los principales materiales agregados para la construcción.

República Dominicana cuenta con unas favorables condiciones climáticas, ideales para atraer inversión privada en diversos proyectos energéticos del país. Por ejemplo, en el campo de la energía eólica, sus regiones costeras del suroeste y norte del país tiene un potencial para producir 30,000 MW. En el sector de la energía fotovoltaica solar, gracias a su posición geográfica en el Caribe, posee unos grandes niveles de radiación solar todo el año y esto le otorga una capacidad de generación de 50,000MW.     

En el área de la biomasa y residuos sólidos, el país posee un potencial aproximado de 475,000 hectáreas, provenientes de los recursos naturales forestales como la acacia mangium y los residuos agrícolas derivados del bagazo de caña, la cascarilla de arroz, la paja de café y la jícara de coco, la palma africana y la madera.

Adicionalmente, la nación cuenta con un terreno fértil y por explorar en la energía hidroeléctrica, el cual se calcula en 2,095 MW1 y de los cuales únicamente se han desarrollado cerca de 615.93 MW. Esta opción es la mejor para abastecer de energía eléctrica a las comunidades que carecen del servicio.

Gran diversidad de recursos naturales y ecológicos, como sus bellas playas, suelos fértiles, clima cálido e importantes yacimientos minerales, lo que lo convierte en lugar idóneo para explorar e invertir. 

Gracias a sus espectaculares paisajes y los incentivos que ofrece el gobierno de la República Dominica, la industria cinematográfica presentó un crecimiento del 73% en la realización de proyectos extranjeros filmados en el país. Sin duda, la amplia variedad de cordilleras, imponentes ríos y cascadas, bosques tropicales, playas e impresionantes desiertos, son locaciones apetecidas para la realización de producciones audiovisuales como películas, comerciales, telenovelas o reality shows. Adicionalmente, las distintas ciudades del país cuentan con una gran riqueza arquitectónica que permite recrear cualquier época histórica, lo que ha llamado la atención de la industria cinematográfica más importante del mundo.

De acuerdo con el Banco Central de la República Dominicana, la Inversión Extranjera Directa en el sector inmobiliario desde hace dos décadas ha venido presentando un positivo comportamiento, alcanzando los US$4,109.7 millones, lo que evidencia su activa participación en el dinamismo de la economía dominicana. El sector está basado principalmente en el desarrollo de proyectos inmobiliarios de mediano y bajo costo, como son los establecimientos comerciales y oferta hotelera para el turismo.     Esto ha incentivado a la industria de insumos y materiales de construcción, así como los servicios especializados para el estudio, diseño y ejecución de los proyectos.