A partir del 30 de junio del 2023, las sociedades mercantiles mexicanas deben a cumplir con un requisito obligatorio ante el Registro Federal de Contribuyentes (RFC): reportar la incorporación o salida de sus socios o accionistas. Esta medida, impulsada por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), tiene como objetivo garantizar la transparencia en las estructuras corporativas y reforzar el control fiscal sobre las transacciones y cambios en la composición de las empresas.
¿Cómo hacer este procedimiento?
El trámite de notificación sobre los cambios en la estructura corporativa se debe realizar dentro de los 30 días hábiles posteriores al evento que origine la modificación (incorporación o salida de socios o accionistas). Para llevarlo a cabo, las empresas deben ingresar al portal del SAT y presentar una "notificación de aclaración de estructura corporativa" y aquí debe incluir información relevante, como el nombre completo y el número de identificación del contribuyente de la persona que será retirada.
Una vez complete el trámite, el representante legal de la empresa o el interesado tiene la opción de consultar el estado de su solicitud. El SAT permite realizar este seguimiento a partir de los siete días hábiles posteriores a la presentación de la novedad, a través del portal institucional utilizando el número de folio que se genera durante el proceso.
No se exponga a multas o sanciones
El incumplimiento de esta normativa puede generar serias consecuencias para las empresas. El SAT ha establecido multas que están entre los 4,200 y 8,390 pesos mexicanos (MXN) para aquellas sociedades que no actualicen de manera oportuna la información sobre sus socios o accionistas. Esta sanción económica puede ir acompañada de restricciones adicionales, como por ejemplo, la suspensión del uso del certificado de sello digital, lo que limitaría la capacidad de la empresa para emitir comprobantes fiscales digitales por Internet (CFDI), esenciales para las transacciones comerciales diarias y el cumplimiento de obligaciones fiscales.
La actualización de la información de los socios es, por lo tanto, una tarea fundamental no solo para evitar sanciones, sino también para garantizar que la empresa se mantenga en regla frente al fisco y no enfrente limitaciones operativas.
Cada día más exigentes
Desde la implementación de esta obligación, el SAT ha intensificado su fiscalización sobre las sociedades mercantiles mexicanas. Según datos recientes generados por la Secretaría de Hacienda, hasta el cierre del tercer trimestre de 2023, más de 150,000 empresas presentaron la notificación de cambios en sus socios o accionistas, lo que representa un incremento del 12% en comparación con el mismo periodo de 2022. Esta cifra ratifica que la medida está siendo adoptada por un gran número de empresas que buscan mantenerse dentro de la legalidad y evitar sanciones.
El endurecimiento de las regulaciones y el aumento en la fiscalización son parte de los esfuerzos del gobierno mexicano para combatir la evasión fiscal y asegurar que las empresas operen dentro de un marco regulatorio más transparente. Se estima que la falta de control sobre los cambios en las estructuras corporativas puede generar un vacío en la trazabilidad de las operaciones comerciales y, en algunos casos, facilitar prácticas de evasión fiscal.
Cambios normativos en el contexto del Código Fiscal de la Federación
La medida actual se fundamenta en la modificación del Artículo 27 del Código Fiscal de la Federación (CFF). Esta disposición busca actualizar de manera sistemática las normativas fiscales de acuerdo con la realidad económica y comercial actual de México. Entre los aspectos modificados se encuentran la Ley de Impuestos sobre la Renta (ISR), la Ley del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), todas ellas esenciales para el control fiscal y la recaudación de ingresos.
El CFF ha sido la columna vertebral del sistema tributario mexicano, y sus recientes modificaciones buscan no solo simplificar los procesos, sino también hacer que el cumplimiento sea más riguroso. Estas actualizaciones permiten que las autoridades fiscales tengan una visión más clara de las estructuras empresariales y tomen medidas más precisas ante posibles irregularidades o incumplimientos.
La obligación de notificar la incorporación o salida de socios o accionistas es una de las reformas fiscales más importantes que se vienen implementando desde el año pasado para las empresas mexicanas. Además de ser una herramienta clave para la fiscalización y la transparencia, garantiza que las sociedades mercantiles cumplan con sus responsabilidades tributarias de manera efectiva y oportuna.
Las empresas deben ser conscientes de que el incumplimiento de esta obligación no solo les traerá sanciones económicas, sino que también podría impactar su operatividad al restringir el uso del certificado de sello digital. Ante este panorama, resulta esencial que los empresarios y representantes legales tengan actualizada la información corporativa y eviten caer en faltas que puedan generar sanciones.